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¿Te preguntas cómo doblar un edredón de forma que no resulte complicado? Aquí te enseñaremos no sólo una, sino cuatro técnicas para hacerlo.
Un edredón mal doblado puede ocupar mucho más espacio del que debería en tu dormitorio. Por no mencionar que, si te resulta aburrido doblar el edredón, corres el riesgo de volverte perezoso a la hora de hacer la cama todos los días. Pero este sencillo hábito aporta varios beneficios a tu rutina.
En resumen: plegar el edredón es difícil sólo para quien no sabe cómo hacerlo. ¡Sólo hace falta practicar! A continuación, te convenceremos de lo fácil que es.
Cómo doblar el edredón en 4 técnicas diferentes
¿Alguna vez has intentado coger un edredón de la balda alta del armario, se ha abierto el pliegue y te ha caído todo el peso sobre la cabeza? ¿O has hecho el mayor desastre, estorbando otras piezas que estaban dobladas?
Con los siguientes consejos, no te volverá a pasar. Además, sirven tanto para edredones dobles como individuales, ¿verdad?
Cómo doblar un edredón
Abra el edredón sobre la cama u otra superficie plana. A lo ancho, coja una tira de algo menos de un tercio del edredón y gírela por debajo.
Coge un lado del edredón y llévalo al centro. Haz lo mismo con el otro lado, de forma que uno quede encima del otro sobre el edredón.
Ahora dóblalo por la mitad a lo largo, luego coge el lado por el que empezaste con la tira y llévalo al centro. Este lado contiene una abertura, como la boca del sobre.
Ver también: Armario: consejos de organización y limpiezaCoge el otro lado y encájalo dentro de la abertura. Para terminar, sólo tienes que invertir la parte de la tira que quedó fuera, envolviendo toda la pieza como si fuera un paquete.
Cómo doblar el edredón para que ocupe menos espacio
Esta técnica es genial para ti que necesitas saber cómo doblar un edredón grueso y optimizar el espacio dentro de tu armario.
El secreto para plegar edredones voluminosos es empezar siempre a lo largo, ya que así el pliegue será más compacto.
Dobla el edredón por la mitad. Ahora, a lo ancho, coge una solapa del edredón y dale la vuelta, pero no será toda la solapa. Coloca el antebrazo sobre la solapa, de modo que la muñeca quede al principio del edredón y el codo más o menos en el centro.
Marca dónde está el codo: éste será el pliegue del doblez de la solapa, que llevarás hasta el borde del quilt, por el lado superior. La solapa que quedó abierta, dóblala hacia el lado inferior.
Aquí tendrás un rectángulo. A lo largo, dóblalo dos veces. Verás que queda una tira que envuelve el pliegue. Localiza el lado del edredón donde queda un extremo suelto y dóblalo por la mitad.
Para cerrar: por un lado, quedará una cavidad a lo largo de todo el pliegue. Gírelo en sentido contrario, de modo que entre todo el edredón y quede cubierto.
Cómo doblar un edredón para convertirlo en cojín
Para doblar un edredón que se convierte en almohada, se recomienda que la pieza no sea demasiado voluminosa, o no tendrá la forma deseada
Empieza doblando el edredón a la manera tradicional, de extremo a extremo. Dóblalo por la mitad a lo largo y luego a lo ancho.
A continuación, coloca el edredón doblado sobre una superficie. Coge un lado y dóblalo por la mitad a lo ancho. Haz lo mismo con el otro lado, de modo que uno quede encima del otro.
A lo largo, lleva el extremo con la abertura del sobre hacia el centro. Mete el otro extremo por dentro y voilá, ya tienes un pliegue en forma de cuadrado que no se deshace.
Cómo doblar el edredón en rollo
En este caso, tampoco es muy adecuado que utilices un edredón grueso, ya que sólo conseguirás que el resultado sea aún más voluminoso.
Abre el edredón y dóblalo de modo que quede en forma de cuadrado. Coge dos extremos, uno enfrente del otro, en diagonal, y llévalos al centro del cuadrado de modo que un extremo quede ligeramente por encima del otro.
Dale la vuelta con cuidado al edredón para que tenga forma de rectángulo, pero con dos extremos triangulares.
Coge un extremo y empieza a enrollarlo para formar el rollo. Cuando llegues al final, el extremo restante debe encajar en una abertura del rollo.
¿Dónde guardar el edredón?
El mejor lugar para guardar los edredones depende del espacio que tengas en casa. Normalmente se guardan en el armario, que suele ser el lugar más práctico en el día a día.
Pero también puedes dejarlo encima de la propia cama, siempre que el ambiente del dormitorio esté siempre limpio y aireado, ¿vale? Con los pliegues que enseñamos arriba, ¡quedará precioso!
Si los edredones van a estar guardados durante mucho tiempo en el armario, por ejemplo en verano, lo mejor es comprarlos en bolsas TNT. Si aún conservas el embalaje en el que vino el edredón de la tienda, también puedes utilizarlo.
Analiza también la mejor forma de apilar los edredones, porque hay casos en los que guardar uno al lado del otro es mejor que apilarlos.
Vaya, ahora que ya sabes cómo doblar un edredón y cómo guardarlo correctamente, ¿qué técnica vas a probar primero?
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